Figura 1
Figura 2
Figura 3
Como parte final de mi breve publicación, mostraré algunos resultados que muestran cómo esta actividad muestra una significante correlación con el aumento de la actividad sísmica en el área circundante. En Estados Unidos, donde el fracking es una técnica usada frecuentemente, se cuenta con el lapso de tiempo necesario en el cual se ha estudiado los efectos secundarios del fracking durante varios años. Primero que nada, Texas y Oklahoma son estados donde la técnica del fracking predomina, y varios estudios durante años recientes han señalado que el aumento de la actividad sísmica podría tener correlación con la técnica del fracking. Por ejemplo, en Texas, un estudio por científicos de la Universidad Metodista del Sur (SMU) determinó que la mayoría de los terremotos probablemente inducidos han ido aumentando durante los últimos años (Fig. 1). Por el otro lado, en cuanto a los datos de Oklahoma, un equipo de geofísicos en la Universidad de Stanford han señalado que mayormente, los terremotos no son ocasionados por el agua que viene de regreso del fracking mezclada con químicos (flowback water), sino en su mayoría, por el agua que ya se encuentra en los subsuelos mezclada con sales que se extrae como desecho (produced water) y es inyectada en pozos más profundos (Fig. 2. Artículo aquí). De cualquier manera, en ambos casos la técnica del fracking parece tener que ver con el asunto. Sin embargo, para zanjar más el asunto, otro estudio en SMU investigó si los terremotos eran provocados por el fracking y desechos de agua o un posible fenómeno cíclico (datos en Fig. 3), un aumento en la actividad sísmica que puede repetirse de manera natural con los años. El estudio determinó que los terremotos recientes son de origen inducido. Conclusión: La privatización del agua en México, como la mayoría de las políticas neoliberales, iban a traer consigo problemas, ya sea sequías en otras áreas del país, aumento en la actividad sísmica, o la inmersión de industrias extranjeras para desarrollar el fracking. Los datos en nuestros vecinos del norte respaldan lo anterior, y una de las primeras decisiones del gabinete de AMLO en aquel entonces, nos han ahorrado problemas. Gracias!